06 de junio del 2025
Según un estudio del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación
Galería multimediaEl ministerio realiza un análisis detallado sobre dos temas claves del sector agrario: la igualdad y la situación de la juventud
El número de jóvenes ocupados en el sector agrario descendió entre 2009 y 2021 el 11 %, pese al incremento global de ocupados
La mujer solo representa el 26,3 % de la población activa agraria y cobra una media de seis euros menos por jornada que el hombre
La juventud agraria española valora, de manera consensuada, la necesidad de introducir nuevas tecnologías e innovar para que sus explotaciones sean viables en el futuro, según uno de los dos estudios de diagnóstico sobre el sector agrario elaborado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, publicados en su a página web (“Diagnóstico de la juventud agraria” y “Diagnóstico de la mano de obra agraria con perspectiva de género”). Los resultados obtenidos permiten cuantificar las diferencias todavía hoy existentes entre los jóvenes que trabajan en el sector agroalimentario, así como entre hombres y mujeres, con especificidades dentro de la población activa entre la mano de obra asalariada, la ayuda familiar, el empresariado y la población desempleada. El Diagnóstico de la juventud agraria pone de relieve que en el sector se mantiene un desequilibrio poblacional. En el periodo de estudio, de 2009 a 2021, el número total de ocupados aumentó un 2,9 %; pero en ocupados jóvenes descendió casi un 11 %. El segmento con menor tasa de ocupación es el de menores de 25 años y las mujeres jóvenes. Sin embargo, la juventud agraria presenta mayor nivel de formación que los mayores de 41 años. Dentro de la población joven ocupada en el sector agrario, hay una amplia representación de personas con otras nacionalidades. El 35,7 % de los ocupados jóvenes son extranjeros o con doble nacionalidad, frente al 27,6 % de extranjeros en el total de los ocupados agrarios. También destaca que la población ocupada agraria joven está representada mayoritariamente por asalariados, con un fuerte componente temporal en cuanto a las relaciones contractuales. Así, casi el 80 % de jóvenes menores de 25 años tiene un contrato temporal. Además, las explotaciones con jefes jóvenes se concentran en los rangos de Producción Estándar Total (PET) más altos y los jóvenes logran producciones de mayor valor monetario que los jefes de explotación de más edad. BRECHA DE GÉNERO En el caso del Diagnóstico de la mano de obra agraria con perspectiva de género, el estudio pone de manifiesto que las mujeres suponen tan solo el 26,3 % de la población activa agraria, tienen explotaciones más pequeñas (17,9 hectáreas frente a 29,5 ha de las de los hombres), y menos competitivas a nivel económico con PET inferiores (31.137 frente a 57.004 euros). También señala que continúa la brecha salarial en el sector, ya que las mujeres cobran una media de seis euros menos al día que los hombres. El análisis desagrega un gran número de datos por Orientación Técnico-Económica para conocer la situación específica en la que se encuentran las mujeres en cada una de ellas. Es el caso del número de explotaciones, edad de los jefes de explotación, el peso de las mujeres en las diferentes comunidades autónomas, la distribución territorial u otros datos como superficie agrícola utilizada (SAU) o producción estándar. Las investigaciones, basadas en 800 encuestas ad hoc y fuentes estadísticas disponibles, radiografían con visión sociodemográfica y económica la realidad de las mujeres y la juventud en el sector agrario. Los análisis suponen un hito más en la apuesta que hace el ministerio en su hoja de ruta a favor del relevo generacional.