Desde Alles, el camino recorre de este a oeste la cara sur de la Sierra del Cuera, un macizo montañoso declarado Paisaje Protegido que se sitúa a apenas cuatro kilómetros del litoral, entre el mar y las cumbres más altas, delimitando dos espacios geográficos distintos en ambas vertientes, La Marina llanisca y El Trascuera.
La segunda etapa del Camino Natural comienza en Alles, capital de Peñamellera Alta, ubicada a los pies de la Sierra del Cuera, y prosigue en sentido oeste recorriendo la cara sur del macizo montañoso, para terminar descendiendo en su último tramo hasta Carreña, en el concejo de Cabrales.
A las afueras de Alles, se encuentran los restos de la iglesia de San Pedro de Plecín (declarada Bien de Interés Cultural), un bello templo tardorrománico con una cronología que varía entre los siglos XI-XIII. Fue construida sobre otra iglesia prerrománica y bajo ella también se han encontrado restos arqueológicos de una amplia necrópolis medieval. La iglesia de San Pedro de Plecín se mantuvo en pie hasta el siglo XVIII bajo el mecenazgo de la familia Mier y fue convertida en cementerio al inaugurarse la vecina iglesia de San Pedro.
En la primera parte, la etapa realiza un descenso pronunciado hacia el valle del río Janu, afluente del Cares, por un sendero entre encinares eurosiberianos (Quercus ilex y Quercus rotundifolia), protegidos por la legislación autonómica y catalogados como de interés especial, apareciendo además especies típicas en la zona, como robles (Quercus robur), avellanos (Corylus avellana) y castaños (Castanea sativa). En este tramo, deberemos prestar atención a las señales direccionales, especialmente después de cruzar el río Sedo.
Posteriormente, el sendero sale a una carretera asfaltada y prosigue en ligero ascenso por ella, paralelo al río Janu y entre laderas de brezo (Erica sp.) y tojo (Ulex europaeus). En esta carretera asfaltada y en dirección al Pontón, a unos 400 m del camino natural se localiza la Cueva de Abrigo del Traúno (declarada Bien de Interés Cultural), donde se pueden hallar huellas de pinturas rupestres.
Tras cruzar el puente sobre el río Rumor, la ruta se desvía a la izquierda y prosigue por una pista de zahorra. El trayecto continúa y pocos metros después, cruzaremos el río Janu, donde tendremos que extremar las precauciones, ya que no existe paso para hacerlo. Asimismo, deberemos prestar especial atención a las señales direccionales. Un poco más tarde, volveremos a cruzar el río, está vez sobre un puente de piedra. La ruta asciende con moderada pendiente hasta Rozagás, desde donde podremos observar los pastos calcícolas y la Sierra del Cuera, a espaldas del camino.
Desde Rozagás, el camino continúa ascendiendo por la carretera AS-345 hasta una majada divisoria entre los concejos de Peñamellera Alta y Cabrales. En este punto, la carretera desciende en ligera pendiente hasta Arangas, atravesando este núcleo rural. A poca distancia de allí y una vez pasada la vaguada, el trazado prosigue por una pista, que asciende a la derecha de la carretera entre pastos y bosquetes de castaños y robles.
Cerca del núcleo de Arangas se documenta la existencia de la Cueva de Los Canes (declarada Bien de Interés Cultural). Se trata de una sencilla cavidad de grandes bocas, con alrededor de 1 km de desarrollo horizontal y recorrido meandriforme con pequeño cauce activo, donde se puede observar claramente el trabajo erosivo del agua sobre las roca, y de actividad prehistórica. Conserva un modesto conjunto de arte rupestre, a base de líneas grabadas con los dedos sobre una fina capa de arcilla de descalcificación que cubre la roca, formando conjuntos de trazos paralelos, rectos o ligeramente ondulados.
En esta parte de la etapa, el camino asciende con bastante pendiente, en algunos tramos sobre hormigón, hasta Pandellamas. Alcanzado el collado, deberemos prestar atención a las señales direccionales, ya que el trazado se desvía a la izquierda y, poco antes de llegar a unas cabañas, gira nuevamente a la izquierda, descendiendo abruptamente al lado de un muro de piedra, hacia la unión de dos arroyos. Una vez rebasados los arroyos, el sendero continúa ladera arriba en fuerte pendiente y rodea un pastizal delimitado por un muro de piedra y castaños. En esta parte de la etapa, disfrutaremos de unas fantásticas panorámicas de la Sierra Pañalba y, tras ella, de los Picos de Europa, siendo perfectamente visible el Picu Urriellu.
El ascenso finaliza en el Collau de Pandejana, donde comienza una pista de zahorra, con hormigón en algunos tramos, y por la que seguiremos el resto del descenso hasta finalizar la etapa en Carreña.
La Sierra del Cuera es una pequeña cordillera de roca caliza situada a medio camino entre el mar y las montañas más altas, con una longitud de 40 kilómetros desde las inmediaciones del río Sella hasta las del Deva. Se trata de una barrera montañosa muy próxima a la costa, que delimita dos espacios geográficos de distinta evolución: La Marina llanisca y El Trascuera, situados en cada vertiente.
El Paisaje Protegido de la Sierra del Cuera se encuentra en la parte oriental de Asturias y se extiende por los concejos de Cabrales, Llanes, Peñamellera Baja, Peñamellera Alta y Ribadedeva. Esta barrera litoral hace de límite entre los concejos de Llanes y Ribadedeva, al norte, y Cabrales, Peñamellera Alta y Peñamellera Baja, al sur.
Entre la flora situada en este espacio natural protegido destacan la encina (Quercus ilex), el helecho macho asturiano (Dryopteris corleyi), que es un endemismo cantábrico, y el helecho de los colchoneros (Culcita macrocarpa). Entre la fauna de mayor interés observable en la Sierra del Cuera se encuentran distintas rapaces como el azor (Accipiter gentilis), el halcón peregrino (Falco peregrinus), el buitre común (Gyps fulvus), el alimoche (Neophron percnopterus) o el águila real (Aquila chrysaetos).
La villa de Alles, capital de Peñamellera Alta, está marcada por la presencia de la estirpe de Mier, omnipresente en toda la comarca. La iglesia de San Pedro, de finales del siglo XVIII, fue financiada por Juan de Mier y Villar. Este templo consta de tres naves grandes, de exageradas dimensiones para el lugar en que fue erigido, una torre campanario y un acentuado gusto barroco.
En el centro del pueblo se suceden los caserones de estilo montañés, recios, cuadrados, elegantes y encalados de blanco y, a las afueras, sobre una roca caliza, afilada y cilíndrica, se erigen los muros circulares de lo que resta de un torreón medieval defensivo, la torre de Lombero, por el barrio en el que se encuentra. Su fábrica medieval fue transformada en 1646 por Domingo de Mier y Trespalacios, cuando dejó de ser útil como punto defensivo.
En la plaza donde se encuentra el centro de salud, junto a la capilla de la Reina de los Ángeles, del siglo XVIII, se encuentra la Casona del Pedroso, ahora transformada en viviendas. En la fachada, tiene un gran escudo con dos leones entre los que cuales aparece la leyenda de la familia Mier: “Adelante el de Mier por más valer”.