La antigua estación de San Leonardo de Yagüe es el punto de partida de este viaje que discurre por extensos bosques de pinar, entre los que destaca el Pinar Grande. En la década de los 60 del siglo pasado este inmejorable marco natural fue testigo del rodaje cinematográfico de varias escenas del Doctor Zhivago, inspirada por la semejanza de estos paisajes sorianos con las regiones rusas por las que se desarrollaba esta dramática historia.
Este tramo del Camino Natural Santander-Mediterráneo comienza en la antigua estación de San Leonardo de Yagüe, en el extremo oriental de la localidad, donde un área de descanso dotada de panel interpretativo ilustra al viajero de las bondades de este trazado.
Comenzando el viaje en el punto kilométrico 0 se abandona la localidad de San Leonardo de Yagüe, avanzando con la carretera N-234 a la derecha del trazado y el bosque de pinos a la izquierda. La piscina y otras instalaciones deportivas municipales y la cercana área recreativa Fuente de La Gitana, situadas tras la mencionada carretera, coinciden con el primer kilómetro de recorrido.
A continuación se alcanza un tramo de poco más de 150 m donde se ha conservado el trazado ferroviario original, avanzando por el camino acondicionado al efecto pegado a él. Esta particularidad ha sido motivada porque en este y otros lugares del trazado ferroviario se rodaron varias escenas de la galardonada película Doctor Zhivago.
El paisaje continua dominado por el bosque de pino silvestre (Pinus sylvestris) encontrándose el viajero en una de las comarcas con mayor tradición forestal del país, sucediéndose los montes incluidos dentro del Catálogo de Montes de Utilidad Pública de Castilla y León. El trazado gira al norte, comenzando una suave subida gracias a los criterios de pendientes máximas de la antigua línea de ferrocarril. Se supera un paso canadiense y poco después el punto kilométrico 3.
Continuando inmerso en el bosque, el viajero, tras dejar atrás el punto kilométrico 6, gira a la derecha y poco después a la izquierda, avanzando por una pista forestal. A la izquierda se deja la antigua estación de Navaleno, hoy reconvertida en alojamiento rural, donde entorno a ella se ha conservado el segundo tramo de vía férrea original, por ello el desvío anteriormente mencionado.
Se avanza en paralelo a la carretera SO-P-6002, para finalmente cruzarla tomando las debidas precauciones, continuando después nuevamente por el antiguo trazado ferroviario. Un nuevo paso canadiense, metros antes del punto kilométrico 8, indica al viajero su entrada en el Pinar Grande, que se extiende por unas 12.000 ha.
Puentes por encima del trazado y cruces de caminos se suceden al igual que los kilómetros, hasta llegar al punto kilométrico 13, donde se localiza un área de descanso poco después de la antigua estación de Pinar Grande. Su estado ruinoso actual contrasta con la importancia que tuvo en el pasado, siendo la estación localizada a mayor altitud de todo este trazado ferroviario.
Poco a poco se inicia el suave descenso con el pino silvestre como fiel compañero. Tras varios kilómetros, se alcanza el punto kilómetro 18 y después el paso canadiense que pone fin al Pinar Grande, donde el ganado vacuno se alimenta aprovechando los frescos pastos que aquí crecen.
Un kilómetro después un nuevo paso canadiense acerca al viajero a la ermita de La Blanca, que con sus grandes dimensiones se erige dominando el paisaje y donde cada tercer sábado de julio tiene lugar su conocida romería que congrega a los vecinos de los Pueblos de la Concordia.
Tras cruzar la carretera SO-P-5018, extremando las precauciones, se alcanza el punto kilométrico 20 y poco después el antiguo apeadero de Cabrejas del Pinar. En claro descenso y avanzando en paralelo a la carretera N-234, se cruza la carretera de acceso a Cabrejas del Pinar, dejando a la derecha su cementerio municipal. Metros antes del punto kilométrico 23 se cruza la carretera SO-P-5033, conviene tener cuidado ya que es también una carretera de acceso a la mencionada localidad soriana.
Cultivos de cereal tiñen de verde las primaveras de esta parte del trazado con los sabinares de la Sierra de Cabrejas culminando el paisaje. El entorno mantiene la misma tónica, únicamente modificado por algún pequeño rodal de pinar, para poco después de superar el punto kilométrico 26, divisar la antigua estación de Abejar que pone punto final a este tramo del Camino Natural Santander – Mediterráneo entre San Leonardo de Yagüe y Abejar.
Desde San Leonardo de Yagüe, donde tiene lugar el inicio de este tramo del Camino Natural Santander – Mediterráneo, parten las carreteras de acceso al Parque Natural del Cañón del Río Lobos. Por la carretera SO-934 se accede al conocido Puente de los Siete Ojos y por la carretera SO-920 se accede a las cercanías de la ermita de San Bartolomé. El Cañón del Río Lobos fue declarado Parque Natural en 1985, según Decreto 115/1985, de 10 de octubre. Las aguas del río Lobos han ido erosionando pacientemente desde tiempos ancestrales la roca caliza predominante en la zona. Las paredes verticales originadas por este proceso erosivo han dado como resultado un paisaje de espectacular belleza, siendo el hábitat ideal para numerosas especies de fauna, entre las que destaca una numerosa colonia de buitres leonados (Gyps fulvus).
Municipio castellanoleonés del noroeste de la provincia de Soria. Habitado desde tiempos prehistóricos, como atestiguan varios yacimientos localizados en diferentes cuevas del Cañón del Río Lobos. Asentamientos celtas construyeron diferentes castros en la zona y tras la época romana se estableció definitivamente el pueblo de San Leonardo, alrededor de un hospital de peregrinos. Municipio con un marcado carácter forestal, en el que aún en la actualidad basa buena parte de su economía.
Dentro del patrimonio arquitectónico destaca el castillo abaluartado de Juan Manrique de Lara, construcción renacentista del siglo XVI, la iglesia de San Leonardo Abad y el Arco medieval de la Puerta de Aranda, único testigo de la muralla medieval que protegía la localidad en el pasado. Las fiestas de San Leonardo, patrón del municipio, se celebran el 6 de noviembre. El 22 de julio tienen lugar las fiestas de Santa María Magdalena. Y las once danzas de paloteo religioso-guerrero tienen lugar el 2 y 3 de febrero con motivo de las festividades de Las Candelas y San Blas.